
El más notable escultor colombiano es quizás el payanés Edgar Negret, famoso por marcar con su estilo y sus planos rectos y curvados en aluminio el curso de la escultura abstracta, no sólo en Colombia, sino en América Latina por su representativo aporte al desarrollo de la escultura moderna. Las obras públicas de este artista de la estética contemporánea, nacido en 1920 escaparon de la naturaleza tradicional de la escultura, alcanzando amplio reconocimiento internacional.La obra de Negret se dirige básicamente a satisfacer la obsesión de representar cosas tangibles, al que se le atribuye la autoría de un estilo de constructivismo muy personal, en el que el duro metal adquiere una ductilidad impresionante, puesta al servicio de la creación de una amplia colección de formas asociadas con el mundo biológico y con un fértil universo simbólico. Negret ha contribuido a la escultura contemporánea en su tránsito por terrenos del diseño industrial, porque ha escogido como base material de su trabajo la maleable lámina de aluminio cuyas piezas se unen entre sí por medio de gruesos tornillos y tuercas visibles y ostentosos, todo pintado con colores mate, planos en una gama reducida de rojos, azules, grises, amarillos y blancos. Sus exposiciones sobrepasan las cien y han sido presentadas en lugares como Miami, nueva York, Francia, Alemania, España, Japón y Colombia. Las obras de Negret, así mismo, describen desplazamientos secuenciales de extraordinaria movilidad, que recrean poéticamente elementos pertenecientes a la cultura prehispánica, entre las que sobresalen obras de su serie 'tejidos', donde el metal policromado adquiere la apariencia dúctil y decorativa de los textiles; o sus 'serpientes emplumadas', construcciones de prodigiosa movilidad virtual que generan ritmos visuales inagotables